Un seis mil al levantarse cada día



Parece increible, pero es así. Durante tres años he tenido la gran suerte de poder ver a diario, desde casa, al imponente Illimani... una montaña de la Cordillera Andina, la Cordillera Real, de nada mas y nada menos que 6000 metros y que preside la ciudad de La Paz..

Ha sido un auténtico lujo, un placer para la vista. No me cansaba de mirarlo y además desde cada parte de la ciudad su visión es totalmente diferente. Son miles de Illimanis.



Impone, pero a la vez transmite tanta serenidad....

Actualmente tengo una foto del Illimani en mi nevera (otro dia os hablaré de ella y de todos los recuerdos que tengo enganchados ..) ya que así me aseguro de tener sus vistas, de otra manera, a diario.

Una vista que echo muchísimo de menos. Sé que algún dia (y espero no tardar mucho) volveré a visitar a mi querida La Paz, volveré a disfrutar de sus vistas, de su gente y como cada vez que llegaba y veía el Illimani pensar YA ESTOY EN CASA....



si es que no me canso de mirarlo...


Buen lunes!


Comentarios

  1. imagino el sentimiento de poder verla y disfrutarla cada día, de saber que era/es una cuna para tu alma y la paz transmitida al sentirte "en casa" ahora y de otra forma sigue siéndolo. Besos y feliz lunes, os extrañé tanto el sábado, me quedo con el café con leche diario via blog. G

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  2. que bueno Andrea, me gusta leerte. Oye! pero nada de nostalgias, eh!. Lo que vivimos fue bonito y nos llevó hasta hoy. Así que asomate en Barcelona y mira el mar, que eso te costaría mucho más en La Paz...

    Un beso fuerte!

    Carlos

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  3. Carlis!!!!!!!! que sorpresa. Me alegra que te guste. Gracias.

    Son nostalgias pero ya desde la tranquilidad y efectivamente desde Barcelona, el lugar donde hoy por hoy quiero estar.

    Besos a los 3 bondus Garlos, Gemita y julia!

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  4. Estoy segura que volverás... espero que podamos acompañarte! Que buenos son los buenos recuerdos.
    besitos

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